¿Qué patología o dificultades rehabilita un terapeuta del lenguaje?
- Estimulación lingüística en niños de 1 a 3 años, para ayudar a desarrollar habilidades comunicativas, comprensivas y expresivas de acuerdo con su edad.
- Retraso del lenguaje a partir de los 3 años.
- Trastornos de los sonidos del habla (dificultad en la pronunciación)
- Problemas en la fluidez del habla como tartamudez, taquilalia, bradilalia.
- Trastornos de la voz debido a: nódulos, pólipos, cáncer de cuerdas vocales.
- Dificultades auditivas, en el proceso de aprender a escuchar y producción oral.
- Trastornos del neurodesarrollo como en los casos de: discapacidad intelectual, síndrome de Down, Trastorno del espectro autista, entre otros.
- Afasia en adultos, que conlleva problemas para comprender y expresar el lenguaje después de accidentes cerebrovascular, tumor cerebral, afección neurológica.
- Disfagia oral o trastornos de la alimentación, todas aquellas dificultades para comer o tragar con normalidad.
¿Cómo se desarrolla la sesión de Terapia del Lenguaje?
En los niños, la terapia se realiza por medio de aprendizaje con movimiento como son: juegos, cuentos, interacciones dinámicas que son de interés para el paciente y basadas en sus experiencias. En adultos dependerá de la patología o dificultades que presente, de esta manera se usarán técnicas, maniobras y diversos ejercicios cognitivos, orofaciales, entre otros.
Estas actividades se lo realizan dentro de un consultorio de terapia del lenguaje, usando: diversos juguetes, rompecabezas, hojas de trabajo, espejos, juguetes sensoriales y más.
La duración y los resultados de cada paciente dependerán de acuerdo con la capacidad de la persona, la gravedad del problema, apoyo de la familia, culminación del tratamiento y factores externos.
Señales de Alerta
Los trastornos más comunes en la infancia se presentan durante el período de adquisición del lenguaje y se pueden solucionar con una intervención transitoria.
Hay muchos casos en el que los padres asisten a la consulta por recomendación de terceras personas como un familiar o las maestras. Para que a usted le sea más fácil identificar algunas de las señales que alertan sobre posibles dificultades puede revisar esta lista:
- Su niño presenta habla infantilizada (propia de un niño más pequeño) y es difícil de comprender por el adulto o en escenarios fuera de casa.
- Su vocabulario es reducido y tiende a utilizar un lenguaje telegráfico, es decir, con ausencia de nexos verbales como artículos y pronombres.
- Abusa de los gestos, las señas y la mímica para expresarse y cuando no le entienden se frustra.
- Omite determinados sonidos que no sabe pronunciar (“amón” por “jamón”, “pato” por “zapato” o “nano” por “banano”).
- Sustituye unos sonidos por otros que le resultan más fáciles de pronunciar (“tero” por “quiero”, “pezo” por “peso”).
- Distorsiona el lenguaje y da lugar a palabras casi ininteligibles. Tiene su propia jerga.
- Repite muchas veces una sílaba o varias durante la emisión de una frase.
- Respira con la boca abierta.
- Sufre de cambios drásticos en su voz con disfonías frecuentes.